“Anatomía de una caída”: una joya de Justine Triet.
Parafrasear a Godard sería más o menos así: “Lo único que se necesita para hacer una película es un cadáver, fiscales inquisidores y abogados litigantes”. En efecto, este género de cortes y juicios por (supuestos) asesinatos ha aportado varios clásicos, desde Testigo de cargo (1957, Billy Wilder) hasta A Few Good Man (1992, Rob Reiner), […]
“Anatomía de una caída”: una joya de Justine Triet. Leer más »